Supongo que se habrán dado cuenta, si son seguidores del cine fantástico y de acción como yo, que en lo que llevamos de siglo parece que haya un empeño por revisitar los viejos clásicos de los 50, 60, 70 y 80: El Planeta de los Simios, La Invasión de los Ladrones de Cuerpos, Ultimatum a la Tierra, La Montaña Embrujada, Desafío Total... son solo unos cuantos nombres citados de memoria de nuevas versiones de viejos clásicos. La lista de remakes de viejos títulos es kilométrica, y aun hay mas en proyecto. Y si a eso le añadimos todas las secuelas de viejas sagas, así como todas las adaptaciones de novelas o comics de éxito, tendremos que convenir en que son escasas las ideas originales llevadas a la pantalla en la última década larga. Se que esto parece más el tono de una entrada para el Frikinomikon, pero tenía ganas de hacer esta reflexión. El caso es que ahora se anuncia una nueva revision de un clásico de los 80: Robocop. Es uno de esos personajes que forman parte de tu adolescencia, así que es lógico sentir curiosidad. Esta semana se ha dado a conocer el cartel definitivo de la película, y lo que hemos visto, al menos aquí en España, no puede menos que mover a la risión.
Robocop a punto de cruzar el madrileño Paseo de la Castellana.
Seguro que si al bueno de Verhoeven le hubiesen enseñado en 1987 el Detroit de 2013, habría exclamado "¡que corto me he quedado!" El caso es que el ruinoso espectaculo que presenta ahora la otrora orgullosa ciudad del motor es demasiado apocalíptico incluso para servir de escenario a una película distópica. Asi que los creativos se han tenido que buscar otro escenario para las andanzas del cyborg policía. La película se esta rodando en Vancouver, pero no es esa la ciudad que aparece en el cartel. Para sorpresa de muchos, la maquina de defender la ley posa para anunciar su regreso a las pantallas frente a los rascacielos de Madrid.