sábado, 16 de noviembre de 2013

Madrid distópico

Supongo que se habrán dado cuenta, si son seguidores del cine fantástico y de acción como yo, que en lo que llevamos de siglo parece que haya un empeño por revisitar los viejos clásicos de los 50, 60, 70 y 80: El Planeta de los Simios, La Invasión de los Ladrones de Cuerpos, Ultimatum a la Tierra, La Montaña Embrujada, Desafío Total... son solo unos cuantos nombres citados de memoria de nuevas versiones de viejos clásicos. La lista de remakes de viejos títulos es kilométrica, y aun hay mas en proyecto. Y si a eso le añadimos todas las secuelas de viejas sagas, así como todas las adaptaciones de novelas o comics de éxito, tendremos que convenir en que son escasas las ideas originales llevadas a la pantalla en la última década larga. Se que esto parece más el tono de una entrada para el Frikinomikon, pero tenía ganas de hacer esta reflexión. El caso es que ahora se anuncia una nueva revision de un clásico de los 80: Robocop. Es uno de esos personajes que forman parte de tu adolescencia, así que es lógico sentir curiosidad. Esta semana se ha dado a conocer el cartel definitivo de la película, y lo que hemos visto, al menos aquí en España, no puede menos que mover a la risión.

Robocop a punto de cruzar el madrileño Paseo de la Castellana.

Seguro que si al bueno de Verhoeven le hubiesen enseñado en 1987 el Detroit de 2013, habría exclamado "¡que corto me he quedado!" El caso es que el ruinoso espectaculo que presenta ahora la otrora orgullosa ciudad del motor es demasiado apocalíptico incluso para servir de escenario a una película distópica. Asi que los creativos se han tenido que buscar otro escenario para las andanzas del cyborg policía. La película se esta rodando en Vancouver, pero no es esa la ciudad que aparece en el cartel. Para sorpresa de muchos, la maquina de defender la ley posa para anunciar su regreso a las pantallas frente a los rascacielos de Madrid.

jueves, 10 de octubre de 2013

España y la desmemoria histórica.

Comienzo a escribir esta entrada en la terraza del bar de un hostal de mochileros en Phnom Penh. Es de noche, y el informe meteorológico indica 28º de temperatura y una humedad del 84%. El ambiente es agobiante, pero cualquiera acostumbrado a los veranos en Barcelona está más que capacitado para soportar estas condiciones. La sensación de agobio que ahora mismo me embarga no tiene nada que ver con el clima. Ni con comidas exóticas, ni con los proverbiales problemas de tráfico o contaminación de las grandes urbes asiáticas, a los que Phnom Pehn no es ajena. Es una sensación de incomodidad que acostumbra a asaltarme después de visitar ciertos monumentos muy concretos. Es la conciencia de que muy cerca de esta engañosamente tranquila terraza, a apenas la vuelta de la esquina de una bulliciosa arteria por donde cientos de motocicletas luchan cada día por un palmo de asfalto, a un par de cuadras del lugar donde comienzo a escribir estas lineas, se encuentra uno de los más impresionantes monumentos a la miseria más abyecta del ser humano: la infame prisión S-21, donde miles de disidentes políticos fueron torturados y ejecutados durante la dictadura de Pol Pot, hoy convertida en museo memorial a las víctimas del tirano. Pero no se engañen, aunque visitar un lugar así es siempre una experiencia deprimente, tampoco tiene nada que ver con la sensación de agobio que ahora siento. O al menos, no del todo. Es la conciencia de que, bueno, ¿donde está en España el monumento que honre a las víctimas del general Franco, uno de los tiranos más sanguinarios y execrables que ha producido la raza humana? ¿Donde el museo donde se explique, con espeluznante detalle, los horrores a los que sometió a su pueblo? ¿Donde el mausoleo donde reposen, con la dignidad exigida, los restos mortales de sus víctimas? Nada de todo eso que en Camboya, como en tantos otros países con periodos oscuros en su historia, no solo existe, sino que además forma parte destacada de las visitas consideradas imprescindibles en cualquier guia turística, existe en España. A día de hoy, los restos de miles de personas masacradas por el régimen dirigido por este asesino de masas siguen desperdigados por las cunetas de las carreteras, sin un monumento que honre su memoria que pueda ser visitado por locales o extranjeros.

 Uno de los barracones de la antigua prisión S-21, conservado tal cual era.
Foto del autor del texto.

miércoles, 11 de septiembre de 2013

A relaxing cup of Peperistan.

No hace falta más presentaciones. Al fin y al cabo ha sido la comidilla de las redes sociales durante toda la semana. El apoteósico ridículo de la candidatura olímpica de Madrid, patético discurso de la alcaldesa inelecta de Madrid incluido, ha dado y dará aun para infinidad de chistes, y para mas de una teoría conspirativa, como no, de los palmeros habituales del PP, que no reconocerán una metedura de pata de sus amados lideres ni aunque vean al mundo entero reírse de ellos a mandíbula batiente, y clamaran por la existencia de una conjura intergaláctica contra ellos. Los norcoreanos, en comparación, son unos aprendices en esto del culto a la personalidad. Pero para el común de los mortales, hay una serie de errores de bulto evidentes que lastraban la candidatura olímpica de Madrid 2020, haciendo que conseguir la nominación fuese poco menos que una misión imposible.


miércoles, 7 de agosto de 2013

Clásicos casposos: Gibraltar Español.

Hay cosas que pertenecen a la mas rancia tradición. Pero rancia de verdad, de esa que emana un pestilente olor a revenido. Una de ellas es que en España, cuando llega el verano, gobierna la derecha y el Gobierno tiene problemas de imagen, monta un numerito para exaltar el patrioterismo barato, y así, entre soflamas encendidas para consumo de paletos, tapar con la bandera miserias y corruptelas. Habitualmente el chivo expiatorio de estas soflamas solían ser los catalanes, pero como resulta que, después de tantos años de acusarles de ser unos separatistas vendepatrias cada vez que pedían dejar de ser tratados como ciudadanos de segunda, ahora se han empezado a plantear que igual no está tan mal eso de ser separatistas de verdad, y se pasan el día con la calculadora en la mano, para ver si cuadran los números y sale a cuenta declararse independientes, quizá es mejor no provocarles. Por suerte, hay un recurso que siempre estará a mano para exaltar el fervor patriotero de los suyos: Gibraltar.

La ya famosa frontera entre Gibraltar y España (foto de Wikimedia Commons)

Ah, Gibraltar, esa espina clavada en la planta del pie de tanto nostálgico de glorias imperiales más que caducas. Si, ya lo se, es un paraiso fiscal, un nido de corrupción, una base de operaciones de la mafia financiera global, pero ¿me van a decir ahora que eso les importa mucho a los adalides españoles del capitalismo más salvaje? ¿Cuanto votante del PP no tendrá alguna sociedad registrada en la roca a su nombre para evadir impuestos? Por favor, que no nacimos ayer. Les importa bien poco a ellos todo eso. Es más, llorarían amárgamente la desaparición de este y de tantos otros paraisos fiscales. Pero Gibraltar  siempre es un tema que viene muy bien para fidelizar votos del sector mas rancio del electorado de la derecha. Ese nombre evoca entre ellos aromas de franquismo tardío, de transición vigilada, de unos tiempos en que uno podía salir a la calle berreando "¡viva España!" después de entonarse con un par de copas de brandy, y conseguir que le miraran como a un machote peligroso, no como a un gilipollas que no aguanta la bebida como pasa ahora. En España, la caspa siempre tendrá compradores fieles.

sábado, 3 de agosto de 2013

¿El Gran Hermano es de verdad tan idiota? No lo creo.

La semana pasada saltaba la noticia, una de esas que parecen diseñadas expresamente para hacer que pensemos que nuestra seguridad pública está en manos de cretinos. Un matrimonio común y corriente en su casa de Long Island busca en internet precios de algunos objetos que necesitan para su hogar. Ella compara precios de ollas a presión. Él busca una mochila. Una olla a presión nos permite una cocción más rápida de los alimentos, y también más saludable, pues conserva mucho mejor las vitaminas de los mismos. Por su parte, una mochila nos permite cargar de una forma cómoda el equipaje imprescindible mientras caminamos por parajes naturales, disfrutando de la contemplación del paisaje y respirando aire puro. Parece claro que nos encontramos ante una pareja que gusta de llevar una vida sana y deportiva, ¿no es así? Pues parece que para los responsables de seguridad de Long Island estos objetos apuntan a un perfil de personalidad completamente distinto y mucho mas siniestro: dos peligrosos terroristas.

Hoy me he levantado con el ánimo gamberro, así que he hecho esta búsqueda en Internet. A ver lo que tarda la policía en presentarse en mi casa...

sábado, 27 de julio de 2013

El eslabón más débil y la jauría de canallas.

No es extraño que España te sorprenda, muchas veces para mal, a veces para bien, y en algunas ocasiones, para bien y para mal al mismo tiempo. Y siempre suelen ser los mismos los que lo hacen en cada uno de los sentidos. Siempre será el pueblo llano, la gente mas humilde la que te sorprenda para bien, mientras que son los poderosos, los dirigentes económicos y políticos, junto con sus altavoces mediáticos, los que te harán sentir nauseas con su actitud. En estos momentos está en marcha una nueva versión de esta vieja historia, a cuenta de un hecho trágico, el accidente ferroviario que el miércoles 24 de julio se llevó por delante la vida de al menos 80 personas en la ciudad de Santiago de Compostela. En un primer momento fue motivo de orgullo la actitud de los ciudadanos de a pie, volcándose en la ayuda a los damnificados por la catástrofe. Sin embargo, pasadas esa primeras horas, y a medida que la necesidad del apoyo a las víctimas dejaba paso a otra necesidad, la de aclarar las causas de la catástrofe, hemos empezado a ver esa segunda cara mas miserable de este país, esa actitud cobarde y traicionera de aquellos que ostentan responsabilidades, y que siempre están dispuestas a sacudírselas de encima cuando hay un problema, y a poder ser, cargarlas sobre los hombros de aquellos que tienen poca o ninguna capacidad de defenderse.

Cartel anónimo que circula por las redes sociales, criticando el tratamiento de la tragedia ferroviaria por parte del diario ABC.

miércoles, 24 de julio de 2013

¿Y la falta de vergüenza?.

Desde luego, con este gobierno carca y casposo de que disfrutamos en España, no hay día que no nos encontremos con alguna declaración que es toda una patada a la inteligencia. Ahora le ha tocado a la ministra de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad(?) Ana Mato, que, en la rueda de prensa ofrecida al término del Consejo Interterritorial de Sanidad, y preguntada sobre el esperado nuevo tijeretazo, en este caso al Real Decreto que regula el acceso a los tratamientos de reproducción asistida, el acceso a los cuales pretende restringir, facilitándolos únicamente a mujeres menores de 40 años u hombres menores de 55 con diagnóstico médico de infertilidad, y sobre su obvio sesgo discriminatorio hacia las parejas del mismo sexo o mujeres solteras que quieran acceder a estos servicios, ya que de dichas condiciones se deduce fácilmente que solo las parejas heterosexuales podrán ser evaluadas como elegibles, se ha despachado con la siguiente frase, que es de esas que piden a gritos ser grabadas en mármol: "no creo que la falta de varón sea un problema médico".

Vuelve "er masho".

viernes, 12 de julio de 2013

El silencio de los peperos.

En el momento en que escribo estas líneas, en España ya llevamos un par de días surfeando sobre la cresta de la ola que ha causado, en la charca pestilente de aguas estancadas que es la política estatal, la última piedra arrojada por el preso en espera de juicio más famoso de España, el ex-tesorero del Partido Popular Luis Bárcenas, con su entrevista en exclusiva en la edición del 7 de julio de 2013 del diario El Mundo, y la posterior entrega del primero de una presumible serie de documentos, entre los que se encontrarían tanto los originales de aquellas copias a las que en su día tuvo acceso el diario el País, que las publicó en su edición del 31 de enero de 2013, como otros aun desconocidos, y cuyo contenido se presume sería demoledor para importantes figuras del partido gubernamental en España, entre ellas el mismo Mariano Rajoy. Las ramificaciones de este escándalo de presunta financiación ilegal y cobro de sobresueldos irregulares se extienden en el espacio y en el tiempo, y no hay lugar que parezca a salvo de su contaminación. Enfrentados a la tormenta perfecta, entre los miembros del Partido Popular parece que se ha impuesto una táctica desesperada de supervivencia: ha llegado la hora del silencio.

El-que-no-debe-ser-nombrado saludando a público y prensa. Foto de La Vanguardia.